Page 533 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
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nados en el epígrafe anterior, con éstos, que se destinan a zonas concretas de cada región, y que tienen la función de mitigar incidencias medioambientales en sus ámbitos regionales. Por ejemplo, En el caso de Castilla y León se ha utilizado para ampliar la incidencia del Programa de zonas de especial protección para las aves.
Para estos programas, las autoridades autonómicas tuvieron que elegir una lista de zonas para proponer, teniendo en cuenta como principal criterio de selección las dificultades en las relaciones entre la agricultura y el Medio Ambiente. Por consiguiente, las actuaciones se dirigen a cuestiones heterogéneas surgidas por diferentes cauces. Entre ellas, podemos encontrar desde medidas para la conser- vación de sistemas agrarios tradicionales, la protección y modernización de sis- temas de cultivos esenciales para la estabilidad socioecológica de determinadas comarcas o la reducción en el uso de productos fitosanitarios y plaguicidas. De esta manera, en las regiones cantábricas se desarrollan medidas para incidir en el mantenimiento de pastos y de los recursos forestales; en las dos Castillas se centran en los cultivos extensivos y; en las Islas Canarias en los paisajes exóticos.
Las Comunidades Autónomas deben desarrollar una normativa específica para la aplicación de los programas, ya que en el caso de tener las competencias atribuidas, deben constituirse en las unidades gestoras de los mismos. Por este motivo, cada una ha optado por unas prioridades específicas obteniéndose un resultado muy di- verso. Mientras en unas se prefirió aplicar el Programa horizontal en primer lugar, en otras han comenzado por las de zona regionales en virtud de sus propias necesi- dades económicas o ecológicas. No obstante, la necesaria armonización normativa, así como la obligatoria ratificación de los compromisos asumidos por cada parte, puestos de manifiesto en los respectivos convenios de colaboración, ha causado importantes dilaciones en la puesta en marcha de los programas de zona regionales.
La acogida a las denominadas Medidas de zonas seleccionadas ha sido progresiva y, cabe destacar las adaptaciones que con las nuevas orientaciones se dan en cada región, a las Medidas comprendidas en el Programa, quizá con un sentido más estricto, práctico y más ceñidas a las necesidades de cada comarca. Ejemplo de esta adaptación práctica; una vez que han transcurrido los años de gestión del Programa, se hace más fácil percibirlo, por la experiencia en la adecuación de las posibilidades del Programa a las características regionales; son tanto las modifi- caciones de intercambio o introducción de medidas dentro de una determinada zona incluida en el programa anterior, como la presentación de nuevas zonas de actuación específica.
Estas variaciones, en algunos casos, significan exclusivamente, ciertos reajustes presupuestarios entre actuaciones ya aprobadas, y en otros, conllevan reducción
III. ESTUDIO DE CASO
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