Mantenimiento Autónomo Aplicado a Áreas Asistenciales

A diario nos encontramos en nuestros puestos de trabajo con pequeños incidentes que podrían haberse evitado con una adecuada revisión, verificación o aseguramiento del puesto de trabajo antes de ocuparlo. Estos fallos en el estándar (entendiendo estándar como requisito mínimo esperado) acaba o puede acabar generando una merma, de calibre variable, en la calidad prestada considerando ésta de manera externa (por ejemplo, no poder llevarse a cabo una prestación, consumir más tiempo del habitual, o generar otras molestias al usuario) o interna (dificultar o condicionar las condiciones de trabajo el profesional). Estas mermas acaban afectando al servicio funcionalmente (duplicación de citas, pérdidas de tiempo, incremento de actuaciones sin valor) y a la calidad percibida. En nuestro entorno, estas mermas pueden llegar a implicar incluso la afectación en la salud o el pronóstico de los usuarios.

Co-responsabilizar a los trabajadores de verificar que su puesto de trabajo previamente a ocuparlo e implicarlo en la realización de tareas mínimas de seguimiento y mantenimento del mismo forma parte de la filosofía del mantenimiento productivo total, uno de los pilares básicos del lean manufacturing desarrollado desde los años 60 en la industria del motor japonesa. Además de corresponsabiliar al trabajador del estado de su puesto de trabajo, esta experiencia permite: - capacitar al trabajador para notar desperfectos antes de que conduzcan a fallos críticas, que lleguen al usuario o que afecten directamente a su propio desempeño. - Aumentar el conocimiento técnico de los trabajadores respecto a los equipos con los que trabaja. - Mejorar la seguridad minimizando la dependencia del personal de mantenimiento y agilizando la resolución de incidencias o de al menos la afectación que éstas pueden conllevar para el desarrollo del proceso, lo que permite explorar alternativas previamente sin necesidad de improvisar.

Los beneficiarios del proyecto son los usuarios del servicio (entiéndase como tales a ciudadanos, pacientes, etc) y los trabajadores. Los usuarios verán minimizados los riesgos, entendidos éstos como riesgos de pérdidas de la calidad. En determinadas situaciones y ámbitos el riesgo minimizado puede llegar a ser un riesgo real que puede afectar a la pérdida de salud del usuario/paciente. Los trabajadores se verán más implicados con su puesto de trabajo y más seguros en su desempeño ya que saben en todo momento cual es el estado real y con qué elementos pueden contar o no. En muchas ocasiones

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