Page 122 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
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EL PROGRAMA DE MEDIDAS AGROAMBIENTALES EN LA PROVINCIA DE HUELVA
 También se ha mencionado un cierto grado de frivolidad y desconocimien- to en el proceso negociador, incluso el haber sacrificado la agricultura por
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otros intereses económicos y/o políticos”
.
En efecto, en las negociaciones de adhesión se observa que los intereses político- económicos primaron frente a los de ciertos sectores de la agricultura tradicio- nal mediterránea, ampliamente representados en España. Las particularidades de nuestra agricultura no se defendieron con suficiente fuerza frente a los beneficios de que gozaba la centroeuropea.
“La adhesión de España a la Comunidad Europea en 1986 se produjo en momentos de crisis de la Política Agrícola Común. [...] Se esperaba mu- cho, quizá ingenuamente, de las posibilidades y del potencial de nuestros productos mediterráneos, sobre todo de las frutas y hortalizas. [...] En nuestra opinión, España, en las negociaciones de Bruselas, no supo o no pudo hacer ver la singularidad de nuestra agricultura mediterránea y sus limitaciones frente a la agricultura centroeuropea. [...] No es admisible, al establecer las medidas de la reforma de la P.A.C., aplicar el mismo tratamiento a la agricultura española y a la centroeuropea, pues son to- talmente distintas. España está malogrando la oportunidad de crear una agricultura competitiva y de calidad, adaptada al medio, y que sea viable a largo plazo, en vez de ocuparse tanto, y sólo, de los aspectos burocráti- cos y administrativos y de las subvenciones. España tiene un modelo de agricultura singular, propia del área mediterránea, debido a la aridez y a la existencia, bastante generalizada, de suelos de baja calidad con relación a otras regiones agrícolas centroeuropeas. [...] Hasta ahora la aplicación de la Política Agrícola Comunitaria no está contribuyendo a implantar en el Mediterráneo sistemas agrícolas que puedan ser considerados como sostenibles. [...] La agricultura mediterránea está siendo empujada hacia una actitud competitiva con la agricultura del norte y centro de Europa,
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donde tiene todas las de perder”
.
Al aplicar las mismas medidas de reforma sobre dos campos tan diferentes, los resultados no se podían esperar que fueran positivos para ambos, más teniendo en cuenta el tiempo que había dispuesto el sistema agrario centroeuropeo para forta- lecerse y preparar sus estructuras ante lo que era inevitable. Además, la discrimi-
190 LARREA EREÑO, S.: Agricultura, horizonte 2005. Ediciones Mundi-Prensa. Bilbao. 1998. Pág. 19. 191 LARREA EREÑO, S.: Op. Cit. Págs. 19, 20 y 21.
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