Page 135 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva

determinado de utilización por encima del cual todo aumento pone en movimien- to un proceso acumulativo e irreversible de agotamiento. Es decir, en el caso de que la tasa de uso sobrepase el límite de renovación, el flujo del recurso tiende a decrecer, e incluso, puede llegar a perder su capacidad de renovación. Esto ya está ocurriendo, por ejemplo, con el agua, en algunas partes del mundo, en el que una utilización despilfarradora y desordenada puede conducir a un deterioro cualita- tivo al superar su contaminación la capacidad depuradora del ciclo hidrológico.
“Junto a la erosión que, con mayor o menor intensidad, afecta ya al 50% de la superficie total del país (España), la falta de agua potable se ha convertido en la mayor amenaza para el desarrollo futuro del país. En efecto, en las tie- rras sometidas a erosión, más o menos intensa, las aguas de la lluvia fluyen directamente al mar al faltar las plantaciones forestales o de otro tipo capaces de filtrarlas o retenerlas. Por todo ello, el país no puede prescindir de más comarcas agrícolas de montaña ni de otras tierras más o menos llanas, de sus productos y, por supuesto, de sus hombres, puesto que su actual marginación significa un despilfarro intolerable de recursos naturales, un desastre que con
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una política económica más racional, quizás se podría haber evitado”
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Otro ejemplo significativo, por el parangón que puede establecerse con las es- pecies ganaderas, es el de la fauna salvaje. Este recurso renovable ha conocido en la segunda mitad del siglo XX una fuerte reducción tanto en calidad como en variedad. Las causas han sido varias como la destrucción de su hábitat, la caza in- controlada y la sobreexplotación pesquera, lo que ha conducido a la desaparición de numerosas especies.
Los recursos forestales y el suelo también tienen capacidad de renovación siem- pre que la incidencia del hombre no exceda de ciertos niveles. Pero las crecientes demandas de madera, las roturaciones excesivas y la utilización de especies no adecuadas, entre otras causas, ha provocado desde tiempos remotos, pero con mayor intensidad en la actualidad, una creciente pérdida del manto vegetal que está acarreando una progresiva desertización del planeta.
al decir que la raza humana puede superar el desafío. Piensan que es posible un mundo mejor y que aceptar los límites físicos es el primer paso para conseguirlo. No ven como un sacrificio el abandono de los modos de producción no sostenible, sino como una oportunidad para detener el constante abuso en los límites del planeta e iniciar una limitación esencial y voluntaria en las instituciones humanas, en las formas de pensar, en las creencias y en la propia ética. Veinte años después consideran que hay soluciones, al contrario de lo que se planteaba en el informe que les había solicitado el Club de Roma, cuya publicación originó una enorme polémica sobre el agotamiento de las fuentes de energía y el alarmante crecimiento de la población, poco antes de la crisis del petróleo de 1973. MEADOWS, D. H.; MEADOWS D. L.; RANDERS, J. y BEHRENS, W. W.: The Limits to Growth. A Potomac Associates Book. New York. 1972.
13 LARREA EREÑO, S.: Op. Cit. Pág. 71.
II. MARCO TEÓRICO
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