Page 684 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva

EL PROGRAMA DE MEDIDAS AGROAMBIENTALES EN LA PROVINCIA DE HUELVA
Los alcornoques y encinas son las especies que han caracterizado tradicionalmente a la provincia de Huelva y, afortunadamente, se están recuperando gracias al Pro- grama de Forestación de Tierras Agrarias, después de haber pasado una etapa de regresión y su sustitución por eucaliptos. Estas especies dominan el paisaje de los dos Andévalos y de la Sierra, donde comparten más el protagonismo con el castaño.
En cuanto al 19,00% que representan las tierras de cultivo, se basan en los cerea- les del Condado Campiña junto con el olivo y los viñedos, y los cultivos freseros de la Costa y el Condado Litoral, donde también hay un buen número de ex- plotaciones de cítricos, que van en aumento. El cultivo de la vid en el Condado está documentada desde hace siglos, cuando en los viajes colombinos se constata como un elemento más de la carga que transportaban las carabelas descubridoras. A mediados del siglo XX, con la recuperación de la actividad tras la filoxera y el mildiu de las primeras décadas, que dejó esquilmados los viñedos, se centró la co- mercialización en la Palma del Condado, aunque prácticamente toda la cosecha se vendía sin valor añadido alguno, para servir a otras comarcas vitivinícolas como la de Jerez, en el aumento de su producción y de sus ventas, mediante las mezclas. Previamente, los mostos se habían envejecido algunos meses en barricas de roble. Con el encarecimiento de los costes de la mano de obra y de la reposición de las cubas, se optó, debido a su menor precio y su mantenimiento más económico, por cambiar las barricas tradicionales por cubas de hormigón, con lo que el proceso de envejecimiento no aportaba la calidad a la que estaban acostumbrados los com- pradores. Esto produjo una involución de la actividad que terminó con la quiebra de la mayoría de las bodegas y, con el arranque de miles de viñas en la comarca.
Afortunadamente, la situación se revirtió, a finales de los años ochenta, cuando Bollullos Par del Condado, recogió el testigo del municipio vecino; ya que distan apenas sólo 4 kilómetros, y gracias al impulso de las denominaciones de origen; la asociación de varios viticultores; y las ayudas de las Administraciones Públicas; lograron revitalizar la comercialización, y por ende la producción. Además, en esta ocasión, se está añadiendo valor a los caldos en la propia comarca, mediante la pro- moción de la denominación de origen y la distribución a los consumidores finales.
En el resto de los cultivos, destacan los forzados, que han tenido un crecimiento espectacular, debido al empleo de tecnologías más desarrolladas en los sistemas de riego y de protección de las cosechas, como invernaderos, acolchados, tuneli- llos, etcétera; además de una mayor selección y diversificación de las orientacio- nes productivas hacia las hortalizas, los cítricos, las flores, las fresas y fresones. La expansión de las nuevas agriculturas intensivas afecta a diferentes áreas del Condado Litoral, el Condado Campiña y la Costa aunque en algunas de ellas, igual que lo ocurrido con el poniente almeriense, los efectos sobre el paisaje son
684