Page 713 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
P. 713

III. ESTUDIO DE CASO
 De la misma manera, en el caso de la peste porcina, gran parte de Andalucía, inclui- da la provincia de Huelva de forma total, se mantuvo como zona en que todavía no se había extinguido la epidemia, hasta avanzada la década de los noventa, pese a que en la mayoría de las regiones españolas se había levantado la prohibición de las exportaciones a terceros países. La peste porcina rebrota periódicamente, afectando a la importante cabaña de cerdos ibéricos de la Sierra y los Andévalos onubenses, así como a la de los guarros blancos estabulados en granjas; lo que debe tender a des- aparecer, puesto que estos episodios conducen a la esquilma de las producciones, ante el temor de su extensión a otras zonas geográficas. Es especialmente importan- te preservar de estas epidemias, tanto en la variedad clásica como en la africana, a
348 los animales que se alimentan naturalmente en las dehesas onubenses .
Otro de los problemas más característicos del campo andaluz, en cuanto a su inci- dencia ambiental, aunque en menor medida, también afecta a la provincia de Huel- va. Se trata de los vertidos de alpechines. Este problema, al que está siendo difícil encontrar una solución definitiva, a pesar de que iniciativas como las balsas de decantación o su reutilización como abono natural para los olivos tuvieran unos comienzos muy prometedores, se ha extendido por diversas zonas de la geografía provincial donde la producción aceitera genera, anualmente, unas cantidades supe-
349
riores a la capacidad de depuración . Los alpechines son conflictivos por la poten-
cial contaminación que representan para las aguas superficiales y subterráneas, lo que puede suponer un riesgo de toxicidad para los animales y las personas.
La erosión constituye un fenómeno natural integrado en el proceso cíclico de movimiento de los materiales más superficiales del suelo. Generalmente, la pér- dida de suelo por erosión se compensa con la generación natural de nuevas capas de suelo a partir del sustrato litológico. Sin embargo, no siempre la capacidad de regeneración del suelo es suficiente para contrarrestar las pérdidas. Esta situación da lugar a un proceso degenerativo en el que el suelo se va empobreciendo, pau- latinamente, disminuyendo su potencial biológico y productivo. En la inmensa mayoría de los casos, la degradación de los suelos obedece a una aceleración de
350
los procesos erosivos debida a la intervención humana . En la actualidad, el em-
348 Se debe recordar alguno de los importantes reconocimientos internacionales, con que han sido galardonados los artículos obtenidos de los cerdos criados en la Sierra de Huelva. Por ejemplo, mediante la concesión del primer premio al jamón ibérico de bellota ecológico, cosechado por la explotación onubense (concretamente situada en el término de Villanueva de los Castillejos), representada por don Manuel Ponce Limón, en la feria internacional especializada de Nuremberg, en el año 2002.
349 Uno de los casos más destacados a nivel local, de esos años, fueron los producidos en San Bartolomé de la Torre, localidad del Andévalo Occidental, donde existe una almazara, que recientemente ha sido modernizada.
350 “El despegue demográfico que se inicia a fines del siglo XVII en la península ibérica y que tiene su máximo a principios del presente siglo, determinó la puesta en cultivo de muchas zonas marginales poco productivas y con riesgo de erosión elevado. El resultado fue la progresiva degradación de los suelos afectados,
 713
 




















































































   711   712   713   714   715