Page 792 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
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EL PROGRAMA DE MEDIDAS AGROAMBIENTALES EN LA PROVINCIA DE HUELVA
 Finalmente, dentro del subsector forestal se repite el contratiempo de la incidencia de los incendios forestales, incrementándose continuamente la superficie quemada de la Comunidad Autónoma, dificultad que va superándose gracias a la buena mar- cha, en cuanto a trabajos de replantación, del Programa de Forestación de Tierras de Labor, aunque desde que finalizó la década de los noventa, se ha ralentizado, debido a la negociación del nuevo Marco Comunitario de Apoyo y, a su posterior traslado desde las autoridades centrales a las regionales con la necesidad de firmar los res- pectivos acuerdos de convenio para la ejecución y financiación de las medidas.
Por último, en cuanto a la reducción de la utilización de productos fitosanitarios en
la agricultura andaluza, es importante destacar que la aplicación del Programa de
Medidas Agroambientales en la Comunidad Autónoma ya ha empezado a tener con-
secuencias positivas para la conservación del Medio Ambiente en su primer período
de programación, es decir, durante el transcurso del Marco Comunitario de Apoyo
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1994-1999 . Durante los primeros años de desarrollo del Programa se observa un
estancamiento en los niveles de utilización de fertilizantes y productos fitosanitarios
en los campos de cultivo andaluces. No obstante, el mantenimiento de los niveles
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de consumo en estos años , no se explica más que como un paréntesis ocasional en
la escalada existente desde finales de la década de los años setenta del siglo XX. Sin duda, a esta moderación del consumo ha colaborado la implementación del régimen de ayudas y subvenciones a las prácticas agronómicas respetuosas con el Medio Am- biente, quedando de manifiesto, de este modo, uno de sus mayores valores.
Sin embargo, hacia la finalización del período de programación se acelera nue- vamente el consumo de estos “inputs” en la agricultura andaluza, aunque este aumento está directamente relacionado con el incremento de las superficies cul- tivadas, máxime cuando se evidencian nuevas puestas en regadío y otras trans- formaciones agrarias, que van a demandar, en principio, la utilización de estos abonos químicos. Por ello, es más acuciante la necesidad de perseverar en ac- tuaciones como las contempladas en el marco del Programa Agroambiental, que desaceleren esta ascensión imparable, antes que el deterioro sufrido por el recurso edáfico sea irreversible.
27 Las memorias publicadas anualmente por la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía ponen de relieve las consecuencias positivas de la aplicación del Programa Agroambiental para la agricultura andaluza y su medio natural, al reflejar una disminución del progresivo aumento anual en el consumo de productos fitosanitarios y fertilizantes químicos desde la efectiva puesta en marcha del Programa en la Comunidad Autónoma en el año 1996.
28 Las estadísticas anuales que ofrece el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación muestran un estancamiento del consumo de productos agroquímicos en la mitad de la década de los noventa del siglo pasado, después de haberse producido un incremento constante y progresivo en los gastos de las explotaciones agrícolas en este tipo de “inputs”, desde los años setenta. A este respecto también se puede consultar TAMAMES, R. y RUEDA, A.: Estructura Económica de España. Banco Urquijo y Alianza Editorial. Madrid. 2000.
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