Mabel García Murilo
Adrián Fernández del Peral
Nicolás Nuñez de la Torre
Francisco Javier Domínguez Murillo
Mónica García Navarro
La bicicleta es un vehículo económico, sostenible y divertido. Cinco compañeros nos cuentan sus experiencias bicicleteras.
Mabel García Murilo es una licenciada en química que lidera el área de formación del Centro de Prevención de Riesgos Laborales de Sevilla. Su trabajo consiste, principalmente, en organizar actividades formativas y de sensibilización en prevención de riesgos laborales y elaborar estudios y estadísticas de accidentes. Tiene más de doce trienios en la junta.
Es una mujer dinámica que le encantan las manualidades y cualquier tipo de ejercicio físico, pero especialmente la marcha nórdica. Lleva dos años yendo al trabajo en bici (una híbrida básica), haciendo un desplazamiento de unos 5 kilómetros por trayecto. Solo deja de cogerla cuando llueve o necesita ir a alguna visita o reunión. Su lugar de trabajo tiene un aparcamiento seguro para las bicis, lo cual también le da mucha tranquilidad y le anima a cogerla.
Para Mabel ir en bici es mucho más relajante que ir en automóvil, aunque explica que tiene el conveniente de tiempo y la inseguridad, ya que se respeta poco la circulación de bicicletas Le hemos preguntado que piensa que se podría hacer para incentivar esta práctica tan saludable y ecológica. Piensa que se podría apoyar este vehículo mediante campañas en centros de trabajo y centros escolares, así como mejorar algunos tramos en los que no está bien diseñado el carril o simplemente no hay y te ves obligado a circular por la calzada.
Adrián Fernández del Peral es enfermero del Trabajo en el Centro de Prevención de Riesgos Laborales de Jaén. Se dedica a vigilar la salud de los profesionales de la junta (vigilancia individual y colectiva, detección precoz de patologías laborales, gestión preventiva, promoción de la salud en el lugar de trabajo… Es un experto en el sistema informático Medtra (doy fe). Aunque es relativamente nuevo en la Junta, tiene una dilatada trayectoria profesional a sus espaldas, especialmente en el SAS. Es un chico muy dinámico. Le gustan los deportes, cocinar, viajar, estar con su familia y amigos, pasear…
Lleva unos tres años acudiendo en su bici de montaña a trabajar (unos 3 kms entre ida y vuelta). Solo perdona su viaje ciclista cuando llueve.
Nos cuenta que su experiencia es muy agradable, empieza el día haciendo ejercicio que sienta muy bien. Además pasa por lugares bonitos y se relaja fijándose en la gente con la que se cruza o viendo el amanecer.
Lo peor parte es que en su trayecto no hay carril bici, lo cual cree que debe mejorarse para que esta práctica gane más adeptos. Aunque su centro si dispone de un aparcamiento seguro para las bicis.
Para él ir en bici supone dar un paseo muy agradable por la mañana, ya que el recorrido es junto al río Guadalquivir, los Jardines de Murillo y por la Cartuja (antigua Expo 92 de Sevilla). Los mayores inconvenientes son los puntos difíciles del carril bici y que aunque en su centro hay un parking en el exterior para poder aparcar las bicis, no está vigilado, por lo que ya han robado alguna bicicleta de allí.
Francisco Javier Domínguez Murillo es el jefe de servicio del área de Gestión del Conocimiento del Instituto Andaluz de Administración Pública (IAAP). Su trabajo es muy variado, desde acciones para impulsar la disciplina de gestión del conocimiento a la edición en estudios sobre administración pública.
Este “teleco” experto en comunicaciones móviles tiene hobbies muy variados: huertos urbanos, electrónica de hardware libre, navegar, senderismo… Y por si fuera poco, toca en un grupo de rock.
Lleva más de diez años yendo en bici (con alforjas incorporadas para el portátil) al trabajo. La distancia entre su domicilio y el trabajo es de 4 kilómetros por lo que no tarda mucho en llegar. A veces, si llueve o tiene reuniones dispersas con poco tiempo entre ellas, elige motos eléctricas de alquiler.
Disfruta yendo y volviendo del trabajo, a un ritmo muy suave, sintiendo el viento en la cara y no cogiendo atascos casi nunca (porque en Sevilla se pueden encontrar atascos hasta en el carril bici). También le gusta saber que está haciendo ejercicio y que no tendrá que perder tiempo en buscar aparcamiento, ya que en su lugar de trabajo hay un aparcamiento vigilado para su bici.
Da gusto escuchar a Mónica García Navarro hablar de su bici. Esta psicóloga que trabaja en la Consejería de Educación y Deporte nos dice que no es ni la más buena, ni la más bonita, ni la más llamativa, pero es su bici, su amiga, su compañera de aventuras.
A Mónica le encantan los animales y la naturaleza, salir a pasear, hacer senderismo y la pintura. Eso último lo aprendió en casa de su padre pintor, aunque actualmente prefiere ir a exposiciones que pintar ella misma.
Desde que obtuvo su plaza va en bici a trabajar (unos 25 minutos de trayecto), menos cuando llueve, que el carril bici resbala demasiado.
Mónica disfruta enormemente con la experiencia. Le viene bien para las rodillas y para su salud, y le encanta pensar que está ayudando a cuidar el medioambiente con esta práctica. Y aunque nunca ha montado en bici por el ahorro económico, en este momento de precios desorbitados lo agradece.
Su lugar de trabajo tiene parking de bicicletas vigilados y nos comenta que es sorprendente la cantidad de gente que va en bici: “Se llena totalmente“
Y después de estos testimonios, ¿te animas a coger la bici? (yo ya la tengo preparada).
Si te ha gustado este artículo, encontrarás más contenidos interesantes en nuestra sección “Actualidad”.
Y no dejes de ver qué tenemos publicado en los distintos números de EnRed@2.0.