Reserva de la Biosfera ‘Marismas del Odiel’

Naturaleza, por encima de todo

Enrique Martínez Montes. Director conservador Paraje Natural Marismas del Odiel.

Marina Garrido Duclós. Asesora técnico del Paraje Natural.

Ignacio Henares Civantos.

Un lugar especial, con colores, olores y sonidos especiales.

La Reserva de la Biosfera Marismas del Odiel un lugar de muy alto interés natural, histórico y cultural, reforzado porque este maravilloso paraje se encuentra enclavado en el área geográfica que concentra el mayor número de población de la provincia de Huelva, y rodeado por los núcleos urbanos de la ciudad de Huelva, y las localidades de Punta Umbría, Aljaraque y Gibraleón, estando flanqueado por una zona industrial y portuaria de gran actividad.

Está situada en el suroeste de Andalucía, en la provincia de Huelva, en la confluencia de las desembocaduras de los ríos Tinto y Odiel, lo que propicia el encuentro de aguas dulces y saladas, dando lugar a un complejo de estuarios y marismas con variedad de paisajes formados por retorcidos brazos de agua, lagunas, islas, salinas… La Unesco ha reconocido este lugar como uno de los sistemas mareales más sobresalientes y productivos del mundo, que, gracias a su fuerte dinamismo, relaciona marismas, playas, pinares, lagunas, bosques y dunas.

Toda la Reserva de la Biosfera ‘Marismas del Odiel’ en sí es un lugar especial, realmente un paraíso terrenal. Su luz, sus aromas, la diversidad de especies y cantidad de aves, la coexistencia de distintos hábitats, de aguas saladas, de aguas dulces, marisma y bosque mediterráneo, todo ello la convierten en un rincón especial de la geografía onubense y de Andalucía.

En las Reservas de la Biosfera se promueve un modelo de desarrollo social y económico, forjado a través de siglos de interrelación hombre-naturaleza, que es compatible con la conservación de los paisajes, de los ecosistemas y de las especies, siendo laboratorios naturales privilegiados para la investigación y la educación ambiental.

FIGURAS DE PROTECCIÓN

Tras la ampliación de sus límites, realizada en 2017 para adecuarse a las directrices de zonificación de la UNESCO, (con área núcleo, zona tampón y zona de transición), la Reserva de la Biosfera Marismas del Odiel se ha configurado como la suma de varios espacios naturales, que incluye al Paraje Natural Marismas del Odiel y a las Reservas Naturales de la Marisma de El Burro y la Isla de Enmedio, que destacan por el excelente grado de conservación de sus ecosistemas. Todo el conjunto se gestiona y planifica de manera integrada con su zona de influencia socioeconómica.

Además Marismas del Odiel forma parte de la Red Europea Natura 2000, tanto por incluir una Zona de Especial Protección de las Aves como por ser Lugar de Importancia Comunitaria y está reconocida como Zona Húmeda de Importancia Internacional (Convenio Rámsar). Está adherido a la Carta Europea de Turismo Sostenible desde 2012.

FICHA TÉCNICA:

Provincia: Huelva

Municipios: Aljaraque, Gibraleón, Huelva y Punta Umbría

Superficie Total: Inicialmente 7.185 ha. En la actualidad: 18.875 ha

Fecha de declaración: 21 de abril de 1983.

Población: 33.479 habitantes

Instrumentos de planificación: Decreto 169/1990, de 5 de junio, por el que se aprueba el Plan Rector de Uso y Gestión del Paraje Natural de las Marismas del Odiel y de la Isla de Enmedio y la Marisma del Burro, como Reservas Naturales (Boja nº 55, de 3 de julio). En fase final de revisión.

Las marismas mareales más importantes de la Península Ibérica

Gran parte de la riqueza ecológica de las Marismas del Odiel estriba en la variedad de paisajes que conforman este enclave. Desde marismas mareales, a lagunas como la del Batán y la del Taraje, pasando por la playa del Espigón o los bosques de El Almendral, El Acebuchal y La Cascajera.

Al visitante le llama la atención su gran horizontalidad que le permite disfrutar del olor del salitre, de la brisa marina y de la espectacular llegada de centenares de aves que encuentran en esta marisma un lugar idóneo donde nutrirse y en muchos casos un entorno seguro donde poder nidificar.

El sistema funciona como un estuario donde los cauces de ambos ríos depositan al desembocar gran cantidad de sedimentos que junto con el aporte de nutrientes por las mareas constituyen la principal base alimenticia de las aves que pueblan este espacio natural. A su vez, este aporte continuo de sedimentos y la fuerza de las mareas generan islas separadas por extensos brazos de agua como la Isla de Enmedio, la de Saltés y la de Bacuta localizadas al Sur del enclave.

Un mosaico vegetal

La benignidad del clima y la salinidad del medio dan lugar a una abundante, continua y especializada presencia vegetal, con plantas halófilas, resistentes a altas concentraciones de sal. Destacan los almajos (Sarcocornia,Salicornia…) y espartinas, estas últimas especialmente extendidas en zonas de marisma alta constituyendoun paisaje concreto conocido como ‘mar de espartinas’. En los ecosistemas arenosos del humedal crecen tarajes, sabinas negras, coscojas, lentiscos, jaguarzos, jaras y romeros; en las cabeceras de arroyos y esteros periféricos se desarrolla una vegetación palustre constituida por juncos, espadañas y tarajes. Pero en la rica y variada vegetación de esta Reserva de la Biosfera encontramos también formaciones boscosas con pinos, alcornoques, acebuches, mirtos, lentiscos, y resto de especies del matorral mediterráneo.

Enclave estratégico para la avifauna

La biodiversidad vegetal, la dinámica de las mareas en las marismas y su estratégica situación, convierten a esta Reserva de la Biosfera en un lugar de paso obligado para miles de aves, principalmente acuáticas, procedentes de toda Europa que emigran a África. Esta importancia está relacionada con su integración en un conjunto más amplio de zonas húmedas litorales que se extienden desde las marismas del sur de Portugal hasta la desembocadura del Guadalquivir en el Parque Nacional de Doñana, que forman una una red de espacios vitales para los movimientos migratorios de aves.

Se han detectado más de 250 especies de aves, entre residentes, invernantes, estivales y migradoras. En lo que se refiere a reproducción, la espátula es la de mayor importancia en estas marismas, ya que forma colonias en la Isla de Enmedio e isla de la Liebre pero también alberga importantes poblaciones de flamencosinvernantes y reproductores, una colonia de cría de charrancitos y la principal población reproductora de águila pescadora de la Península. Además podemos encontrar garza real, que anida directamente sobre la vegetación del suelo, garza imperial, garceta común, ánade real,aguilucho lagunero, somormujos, cormoranes, diversas especies de gaviotas… así como ves limícolas entre las que destacan archibebes, zarapitos y cigüeñelas. Ocasionalmente también podemos observar ejemplares de cigüeña negra, morito o grulla.

Aunque la avifauna es la protagonista principal de este espacio natural protegido hay otras especies muy interesantes con las que podemos tropezar como ver nadando a la nutria, que ha recolonizado recientemente este lugar, lo que lo convierte en un bioindicador positivo de la buena conservación, encontrarnos con los siempre atractivos camaleones en los ganchos arenosos e incluso podemos tener la fortuna de ver a la muy excepcional musaraña marismeña, perfectamente adaptada al hábitat de naturaleza mareal de la zona.

Desarrollo sostenible que viene de lejos

La riqueza natural de Marismas del Odiel se complementa con los valores de su devenir histórico y cultural, que vinculan estas marismas y sus tierras colindantes con las rutas comerciales mediterráneas y atlánticas desde la Antigüedad.

Históricamente se han combinado los aprovechamientos económicos provenientes de la mar con los derivados de las marismas y de las zonas de tierra firme lo que ha dado como resultado una estructura socioeconómica heterogénea y variable con múltiples sectores y actividades: carpintería de ribera, marisqueo, caza o el aprovechamiento de las masas forestales. En la Reserva se ha practicado tradicionalmente la recolección de piñones, la apicultura, la ganadería, la pesca y el marisqueo.

La producción de sal es uno de los aprovechamientos de los recursos naturales más interesantes de la zona. Las Salinas de Bacuta son un ejemplo de usos tradicionales de salinas extensivas de gran superficie.

Patrimonio cultural

Debido a la riqueza mineral, salina y pesquera de la zona junto a su estratégica situación geográfica, el entorno de las Marismas del Odiel ha vivido la colonización por diversas culturas. Se cree que la antigua ciudad de Tartessos se asentó por estos parajes. De los romanos quedan restos de piletas de salazones de pescado y de los musulmanes, el yacimiento arqueológico de Salthish, (en la isla de Saltés); se trata de una importante ciudad que fue capital del reino taifa de los Baikríes en los siglos X y XI.

Entre los elementos culturales que NO TE DEBES PERDER perder en la visita a la Reserva de la Biosfera destacamos las salinas de Bacuta, de alto valor etnográfico; la carpintería de ribera de Punta Umbría; el muelle del Tinto, de principios del siglo XX y declarado Bien de Interés Cultural en 2003; el molino mareal del Alfarero, donde se obtenía la harina para elaborar el plan de Aljaraque; y el barrio Reina Victoria, de comienzos del siglo XX, que alojaba a los trabajadores de las minas de Río Tinto y Tharsis.

Uso Público

La Reserva de la Biosfera dispone de una interesante oferta de equipamientos de Uso Público que nos permiten conocer y disfrutar de este espacio natural. La cercanía de la Reserva a núcleos de población y sus itinerarios señalizados la convierten en un excelente lugar para hacer senderismo y cicloturismo, o paseos en barco o canoas, embarcaciones que servían de comunicación con la ciudad de Huelva.

Centro de Visitantes Anastasio Senra.

Se encuentra en una zona del Paraje Natural Marismas del Odiel conocida como Calatilla. Su visita permite profundizar en el sistema de marismas mareales asociados a la desembocadura de los ríos Tinto y Odiel y conocer la importancia de este humedal para la supervivencia de muchas especies de aves que, en sus rutas migratorias, hacen parada en este entorno, uno de los mejores conservados de España. Los exteriores del edificio presentan un itinerario interpretativo que da continuidad al centro, que recorre una amplia parcela dotada de itinerario botánico, lagunas con observatorio de aves, vivero demostrativo de vegetación autóctona, etc

Aquí puedes descargar una guía para la visita

Jardín Botánico ‘Dunas del Odiel’.

Ubicado en el monte del mismo nombre, frente al Paraje Natural de las Lagunas de Palos y las Madres. Su objetivo es representar la flora y vegetación característica del Sector Biogeográfico Gaditano-Onubense y Algaviense; un arco costero de 20 a 30 km. de anchura comprendido entre la desembocadura del Guadiana en Huelva y los acantilados de Barbate en Cádiz. Recomendable la parte del jardín reservada para mostrar la relación del hombre con las plantas a través de los usos que tradicionalmente se ha hecho de ellas (plantas medicinales, cultivos tradicionales etc.) que suponen sin duda un bien cultural insustituible.

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