Encarna Moreno Ruiz
Directora
Biblioteca Pública del Estado-Biblioteca Provincial de Jaén
Jaén
Este año la Biblioteca Provincial cumple cincuenta años en su ubicación actual en la calle Santo Reino. Para celebrarlo, el exterior de la biblioteca luce una decoración especial con diseños de Juan Montoro “El Creata”, recordando a los y las jienenses la labor llevada a cabo por la institución a lo largo de estas décadas.
El origen de la biblioteca se remonta al año 1845, fecha de creación del Instituto Provincial de Segunda Enseñanza, con sede en la calle Compañía, y con el fin de custodiar y organizar los fondos bibliográficos de las instituciones religiosas desamortizadas, cumpliendo funciones de apoyo a la docencia, sin acceso público. Por Real Orden de 7 de agosto de 1895 se dispone que sea gestionada por miembros del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Anticuarios. Debido a la ruina de aquel primer emplazamiento, a mediados de la década de 1950 fue trasladada a la calle Julio Ángel.
En 1970 comienza la construcción de la actual sede. Aunque ya en el año anterior se empiezan a prestar servicios en el edificio, es el 4 de diciembre de 1974 cuando tiene lugar la solemne inauguración de la Casa de la Cultura, equipada con salas de lectura, audiovisuales y exposiciones, salón de actos y depósitos que la convertían en un valioso instrumento cultural, según recoge la prensa de la época. El edificio albergaba en un primer momento la Biblioteca Pública del Estado con una colección de cuarenta mil volúmenes y el Archivo Histórico Provincial custodio de ocho mil legajos, además de otros servicios.
Por Real Decreto 864/1984, de 24 de febrero, se transfiere la gestión técnica y administrativa de la biblioteca a la Junta de Andalucía, cuyo convenio se establece por Resolución de 18 de octubre de 1984 y se modifica en la Resolución de 27 de mayo de 1994, aunque la titularidad sigue siendo del Estado. La Biblioteca Pública del Estado-Biblioteca Provincial de Jaén se integra así dentro del Sistema Andaluz de Bibliotecas y dentro del Sistema Español de Bibliotecas.
En este medio siglo la biblioteca ha afrontado grandes retos y cambios: los fondos y usuarios se han multiplicado, se han creando nuevos servicios y los espacios se han ido adaptando a las nuevas demandas culturales. Ha pasado de ser una biblioteca de depósito a biblioteca de libre acceso, y de los catálogos de fichas en cartulina al catálogo colectivo de la Red de Bibliotecas de Andalucía, disponible al público en línea a través de Internet, manteniendo una intensa actividad cultural, tanto por la programación propia, como en colaboración con otras instituciones y asociaciones.
Las cifras hablan por sí solas: 102.049 horas de apertura; 139.137 libros y 26.998 documentos audiovisuables prestables a domicilio; 1.551 títulos de revistas; 25 manuscritos, 2 incunables y 6.500 impresos de los siglos XV-XIX conservados, que forman parte del Patrimonio Bibliográfico Español y Andaluz; 8.835.996 visitas; 3.063.252 préstamos; 52.791 carnés; 3.063.252 consultas al catálogo; 7.481 actividades realizadas, y 3.394 seguidores en redes sociales; clubes de lectura, talleres literarios, acceso a eBiblio y eFilm, entre un sinfín de servicios.
La historia de la Biblioteca Provincial de Jaén no es la de un lugar donde se guardan libros, sino la de un espacio que privilegia la lectura sin excluir medios modernos de transmisión, cumpliendo con sus funciones cultural, social, educadora y económica. Ubicada en el corazón de Jaén, es lugar de encuentro, de comunicación y participación, garantizando el acceso libre y voluntario a la lectura, la investigación y la creatividad. Es un agente social dinámico, facilitando el acercamiento a la información publicada, sea esta impresa o digitalizada. El acceso libre a Internet y a otros medios digitalizados que la biblioteca proporciona contribuye a cubrir la brecha digital. Asimismo, contribuye al proceso de aprendizaje permanente de las personas.
Se cumplen cincuenta años de una institución en Jaén dedicada, tal y como marca el Manifiesto de la UNESCO sobre las bibliotecas públicas, a contribuir al desarrollo integral de los miembros de la comunidad y a su propia identidad, siempre sobre la base de la igualdad de acceso de todas las personas y con su participación, actuando como puente entre la cultura acumulada y el libre acceso a la información, el conocimiento y la recreación.
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