Fco. Javier Domínguez Murillo
Jefe Servicio Gestión del Conocimiento
IAAP, Sevilla
El Festival Internacional de Blues de Cazorla no es solo un evento musical; es una celebración de la pasión, la historia y el alma del blues en uno de los entornos más hermosos de España. Desde su humilde inicio en 1994, este festival ha crecido hasta convertirse en un faro de cultura y comunidad, atrayendo a miles de personas de todo el mundo que se reúnen para compartir su amor por el blues.
Todo comenzó con un sueño compartido por un pequeño grupo de entusiastas del blues que vieron en Cazorla, con su encanto natural y su vibrante comunidad, el lugar perfecto para crear un espacio dedicado a este género musical. Los primeros años del festival fueron íntimos y cálidos, con artistas locales y nacionales tocando en escenarios modestos pero llenos de vida. La visión de estos pioneros era clara: traer el auténtico sonido del blues a Cazorla y compartirlo con el mundo.
Con el tiempo, este sueño se hizo realidad de una manera que pocos podían haber imaginado. Artistas de la talla de B.B. King, Buddy Guy, John Mayall o Robert Cray, entre otros, han dejado su huella en los escenarios de Cazorla, creando noches mágicas que permanecen en la memoria de quienes hemso tenido la suerte de presenciarlas. ¿Cómo olvidar el momento en que B.B. King, sacándole las mejores notas a su Lucille, llenó la noche de Cazorla con su inconfundible voz? O la electrizante presencia de Buddy Guy, que nos hizo vibrar con cada acorde.
Un Escenario Natural de Ensueño
La belleza de Cazorla, con su impresionante parque natural y su rica historia, añade una dimensión única al festival. Escuchar un solo de guitarra mientras el sol se pone detrás de las montañas, o sentir la brisa de la noche mientras las notas del blues llenan el aire en la Plaza de Santa María, el parque o la plaza de toros es un placer para los sentidos. Este entorno incomparable transforma cada concierto en una experiencia casi mágica, donde la música y la naturaleza se entrelazan de manera perfecta.
El impacto del Festival va más allá de la música. Este evento ha unido a la comunidad local, creando un sentido de orgullo y pertenencia. Los negocios locales florecen, los turistas descubren la riqueza cultural y natural de la región, y las nuevas generaciones encuentran en el blues una conexión profunda con la historia y las emociones humanas. Los talleres y las masterclasses ofrecidos durante el festival son una oportunidad para que los jóvenes músicos aprendan de los maestros, asegurando que la llama del blues siga viva y fuerte.
Ni las diversas crisis económicas ni la pandemia de COVID-19 han podido con éste, mi festival de cabecera tras tantos años donde la música ha estado más presente en mi vida de lo que era consciente. En cada acorde, en cada melodía, el Festival Internacional de Blues de Cazorla cuenta una historia de pasión, resistencia y conexión. Es un lugar donde las notas del pasado encuentran eco en el presente y donde cada visitante se convierte en parte de una tradición vibrante y conmovedora. Si alguna vez has sentido la llamada del blues, Cazorla es el lugar donde esa llamada se convierte en una experiencia inolvidable.
¡Nos vemos en Cazorleans!
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