Page 187 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
P. 187

La sobreexplotación de los acuíferos y su posterior salinización por intrusiones de agua de mar, el esquilmado de las arenas de playa, la contaminación de agua y atmósfera por la intensidad de productos químicos incorporados al ciclo de producción rápida, la cada vez más amplia gama de subproductos y residuos or- gánicos e inorgánicos que no reciben un tratamiento adecuado y son difícilmente asimilados por el medio, la degradación de las condiciones higiénico-sanitarias de las poblaciones que habitan ciertas comarcas muy degradadas ambientalmente, todo ello contribuye a la baja calidad de vida en general.
“La integración europea y la política agrícola han conducido a una reduc- ción drástica del empleo agrario, a riesgo de provocar abandonos masivos de tierras así como un despoblamiento rural importante, especialmente en las regiones más aisladas. El problema medioambiental de estas regiones no es tanto una cuestión de contaminaciones ligadas a una agricultura intensi- va, como el mantenimiento de una utilización del territorio que garantice:
– un marco vital aceptable para las poblaciones,
– una protección del paisaje,
– una protección contra ciertos riesgos específicos (incendios forestales)
– una gestión del desarrollo rural que tenga en cuenta el medio ambiente
para evitar que los grandes proyectos de desarrollo (turismo, embalses,
infraestructuras, etc.) destruyan el entorno.
La cuestión consiste, sobre todo, en saber si existe una ordenación del te- rritorio a escala europea, ordenación que tendría en cuenta la realización de funciones productivas suficientes para que estas regiones dispongan de
114
una vía económica que asegure la ocupación del espacio”
.
Una generalización de conflictos no cerrados, que viene a poner de manifiesto el difícil entendimiento entre crecimiento económico y Medio Ambiente, máxime en zonas donde tanto un factor como el otro se encuentran en situaciones límite.
“El cálculo de costes y beneficios económicos no refleja toda la proble- mática ecológica de la agricultura. Los sistemas agrarios convencionales conllevan costes para la sociedad que son más difíciles de cuantificar mo- netariamente pero que repercuten sin duda en las arcas del presupuesto comunitario, estatal y autonómico. La reparación de los desastres ambien- tales, las costosas depuradoras que logran suministrar agua limpia de ni- tratos, el control de los residuos de plaguicidas en nuestros alimentos, la
II. MARCO TEÓRICO
  114 MORMONT, M.: Op. Cit. Págs. 230 y 231.
187
 

















































































   185   186   187   188   189