Page 848 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva
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EL PROGRAMA DE MEDIDAS AGROAMBIENTALES EN LA PROVINCIA DE HUELVA
 De lo que acabamos de exponer, aparte de sacar una conclusión directamente rela- cionada con la implementación de una determinada Política, en este caso la de las Medidas Agroambientales, que no viene deducida del diagnóstico realizado, que por otra parte, podía no ser exacto; también sacamos una conclusión de nivel más elevado por cuanto afecta a la propia formulación de las Políticas Públicas, en general. Se trata
125 de la forma en que los temas de trascendencia política acceden a la agenda pública .
En efecto, en este caso hemos observado cómo la cuestión de las implicaciones am- bientales de las actividades agrarias ingresa entre los asuntos de interés político de una manera diferente. No es una demanda de la sociedad, canalizada por los actores influyentes ante los poderes públicos, sino que son las relaciones con instituciones supranacionales las que propician la entrada de la cuestión en el debate político.
Por supuesto, el punto de vista desde el que se abordan estas cuestiones ha cam- biado sustancialmente, tras los cambios producidos, no sólo a nivel nacional, con la llegada del régimen democrático, sino también a escala internacional, con la adhesión a la Comunidad Europea del Estado español. Cuando las Adminis- traciones Públicas se enfrentan a una situación problemática tienen que tener, en primer lugar, en cuenta el factor competencial. Para ello han de atender a la configuración normativa que rige su actuación. En España, la fuente principal que asigna competencias entre las distintas administraciones es la Constitución Española de 1978, junto a los Estatutos de Autonomía de las Comunidades Au- tónomas. Con anterioridad a ese momento, cuando se producía una necesidad de distribución competencial, sólo había que delimitar entre las administraciones central y local, ésta con unas atribuciones muy limitadas. Ahora hay que contar con las autoridades autonómicas, lo que complica el panorama en gran medida. Pero además, España se ha incorporado al mercado común europeo desde el 1 de enero de 1986, con lo que entra en el juego del diseño e implementación de las Políticas Públicas una nueva organización, que asume ciertas competencias, que anteriormente correspondían, en exclusiva, a la Administración central del Estado. Esto conlleva la realidad de que las decisiones de la Comunidad Europea
125 Son variadas las formas en las que los asuntos entran a formar parte de la agenda de los poderes públicos. No siempre se trata de asuntos sobre los que la ciudadanía tiene una especial preocupación que traslada a las autoridades en forma de presiones o mediante la organización de grupos específicos que defienden la cuestión e informan a la opinión pública. También puede suceder que un acontecimiento particularmente grave pueda desencadenar la introducción de cuestiones pendientes en la agenda de los gobiernos.
“Hay, de golpe, en razón de ciertos eventos críticos que sacuden o entusiasman a la ciudadanía, oportunidades favorables para plantear asuntos olvidados o rechazados (una agenda ecológica en ocasión de epidemias o calamidades, una agenda exportadora a raíz de innovaciones tecnológicas). Todo esto configura un patrón de receptividad gubernamental que contribuye a estabilizar y ordenar el carácter misceláneo y mudable de los reclamos y presiones sociales”.
AGUILAR VILLANUEVA, Luis F.: Problemas públicos y agenda de gobierno. Colección “Antologías de Política Pública”. 3a antología. Edición al cuidado de AGUILAR VILLANUEVA, Luis F. Editorial M. A. Porrúa. México. 1996. Pág. 44.
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