Page 37 - La Participación de la Ciudadanía Andaluza en la Elaboración de las Leyes
P. 37

das de un estudio de valores realizado en 13 países occidentales, se obtiene que la movilización de los grupos importa a la hora de comprender la disposición de los individuos a unirse a ellos.
Milbrath, en su clásico estudio sobre la participación política en Estados Unidos, la clasifica en tres grandes cohortes, en un primer grupo se integran los “apáticos” que no se percatan del aspecto político del entorno y representan aproximadamente un 32%; en un segundo agregado se agrupan los “espectadores” que fundamentalmente votan y como mucho llegan a expresar su identificación con algún partido, son el 60%; y finalmente los “gladiadores” que llevan a cabo un amplio espectro de acciones
35
políticas, pero que no representan más allá del 3% de la población
2.3.1. La participación en los modelos democráticos
.
La participación significa pertenencia, en la medida que se reconoce la pertenencia de un individuo a un determinado sistema político se le concede legal y formalmente el derecho a participar en éste.
De esta concepción se desprenden dos elementos, uno que participa y otro que recono- ce esa actividad. Dentro de la cual distinguimos, en una escala significativa, dos polos:
a) De una parte un significado restrictivo, que designa el proceso de incorporación activa de los ciudadanos a un sistema político lo que tiende a restringirse a los ac- tos electorales y a las acciones que determinan la composición del sistema enten- dido en términos de las personas que ocupan los puestos clave, sus orientaciones políticas y las líneas de acción de los órganos de gobierno, en cuyo caso la parti- cipación se limita a establecer un sistema de representación a través del cual se selecciona a los gobernantes y, al mismo tiempo, se determina los mecanismos por los que se puede influir en los representes. Este significado comprende el modelo de democracia representativa y en último término la explicación de la democracia participativa, importante para el objeto de este trabajo.
b) En el otro extremo de la escala podemos entender la participación política como codecisión lo que implica postular la incorporación directa, sin intermediaciones, de los ciudadanos a los distintos niveles de decisión política, y nos lleva al modelo de democracia directa.
35 MILBRATH, L.: Political Participation, en The Handbook of Political Behavior, S. Long (Ed.), New York, USA: Plenum Press 1981, pp. 197-240.
2. CIUDADANÍA, NORMA Y PARTICIPACIÓN
   37






















































































   35   36   37   38   39