Page 273 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva

y el control de las plagas se hacía mediante plantas que tenían la propiedad de re- pelerlas, y las malas hierbas se evitaban utilizando prácticas agrícolas adecuadas.
“Hasta mediados del siglo XIX, época en que se inició el desarrollo de la in- dustria de los fertilizantes químicos, los fertilizantes orgánicos (estiércoles, residuos urbanos, abonos verdes, etc.) constituían la principal fuente de nutrientes para las plantas. Posteriormente, las materias orgánicas se fueron sustituyendo progresivamente por fertilizantes químicos sintéticos, gene-
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ralmente más baratos y de más fácil transporte, manejo y distribución”
.
La aparición de fertilizantes solubles y fitosanitarios, unidos al proceso de meca- nización, permitieron el uso intensivo del suelo sin tener en cuenta, de manera general, las limitaciones del medio natural y las necesidades de materia orgánica del suelo en particular.
“El suelo está producido por la vida. Todas las teorías agronómicas pedoló- gicas explican que el suelo está producido por condiciones físico-químicas, y esto es falso, completamente falso, está enteramente producido por los sistemas vivos. Tenemos una prueba muy sencilla y es que los planetas que nos rodean (Marte, Venus, Júpiter, etc.) tienen también condiciones físico-
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químicas y en cambio, no tienen suelo, no tienen vida allí”
.
“Luego hay una segunda fertilización que deberá hacer el agricultor, es la
fertilización de los microorganismos vivos del suelo. En efecto, la planta
no sabe comer en el suelo por sí sola, necesita los microorganismos, que le
dan los elementos asimilables. Por lo tanto, es papel del agricultor el nu-
trir, el alimentar a los microorganismos del suelo. ¿Cómo hacerlo? Lo que
hace falta es nutrir los grandes grupos fisiológicos que existen en el suelo.
En primer lugar, hay que alimentar al grupo que se ocupa de la materia
250 orgánica” .
Esta falta de aportes de materia orgánica lleva consigo la paulatina muerte de nuestros suelos, su pérdida de fertilidad, junto a los problemas de contaminación
248 POMARES, F.; TARAZONA, M.; ESTELA, M. y FAUS, R.: “Comparación de la fertilización orgánica mediante lodos de depuradoras y la fertilización natural en patatas, maíz y cítricos”. En Congreso Científico Europeo de Agricultura Biológica. Publicaciones de Extensión Agraria. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Madrid. 1986. Pág. 127.
249 BOURGUIGNON, Claude: “Fertilización orgánica”. En Ponencias del Seminario Agricultura Biológica en los Países Mediterráneos. Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Madrid. 1995. Pág. 11.
250 BOURGUIGNON, Claude: “Hacia un análisis global de los suelos cultivados”. En Ponencias del II Congreso Internacional Agricultura Biológica y Otras Alternativas en el Medio Rural. Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Madrid. 1991. Pág. 63.
II. MARCO TEÓRICO
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