Page 826 - El Programa de Medidas Agroambientales en la provincia de Huelva

EL PROGRAMA DE MEDIDAS AGROAMBIENTALES EN LA PROVINCIA DE HUELVA
El otro ejemplo que destacamos tiene, si cabe, mayor trascendencia, pues incide sobre uno de los principales objetivos del Programa Agroambiental, la compen- sación de rentas de los agricultores que se acojan a las ayudas. Efectivamente, se observa que en muchos casos la compensación ofrecida a través de las subvencio- nes es insuficiente, mientras en otros es excesiva. Esta debilidad es consecuencia de no haber previsto en el diseño del Programa un mayor nivel de detalle en la diferenciación de los distintos tipos de explotaciones agrícolas, sus tamaños, orientaciones productivas, rendimientos, métodos agronómicos practicados, etc. Es algo muy complejo, pero paulatinamente debe corregirse para alcanzar unos resultados más ecuánimes para el sector, ya que esto es importante para elevar la confianza en el mismo por parte de los potenciales beneficiarios.
Por lo que respecta al apartado de la implementación, es muy probable que tampoco se puedan emplear, en el caso estudiado, términos absolutos, como los de éxito o fracaso, pero sí podemos afirmar que el Programa Agroambiental, en la provincia de Huelva, hubiera tenido un mayor grado de aceptación por parte de los agricultores y ganaderos onubenses si se hubiera realizado una
90
Por tanto, la influencia que, sobre la política formulada en la teoría, tiene su im- plementación, queda de manifiesto. El grado de subjetividad que se introduce, puede modificar, como vemos, el resultado obtenido. De hecho, autores como
90 “La experiencia previa y el suministro de información adecuada se consideran factores clave para el éxito de un programa. La información es muy importante en todos los países en los que, en virtud del Reglamento 2.078/1992, se aplican por primera vez programas medioambientales. El crecimiento del índice de aceptación de las medidas en los años siguientes sugiere un modelo de adopción de los programas que se asemeja mucho a la manera clásica de adopción de innovaciones: por un lado se hallan los innovadores y, por otro, los primeros en adoptar las innovaciones. Este hecho no es sorprendente, ya que, en la mayoría de los casos, los programas agroambientales exigen al agricultor introducir novedades técnicas. Sin embargo, la información y la formación han recibido en general escasa atención por parte de los Estados miembros, con las notables excepciones de los Países Bajos, Suecia y Finlandia. En el Reino Unido, el estudio llevado a cabo por la Cámara de los Comunes ha destacado el hecho de que no se hayan puesto en marcha programas acogidos a la opción de formación.
En españa los servicios de difusión de la información sufrieron recortes en la década de los ochenta, por lo que en la de los noventa no estaban en condiciones de prestar asesoramiento amplio sobre los programas agroambientales. La promoción del programa se efectúa mediante información por correo y algunas reuniones de grupos locales”.
Ibid. Pág. 72. (Parte II). 826
mayor difusión del mismo
la Comunidad Autónoma de Andalucía de que los problemas medioambientales provocados por la práctica agraria no llegaban a un nivel alarmante, se traslada, seguramente, de manera inconsciente, a los campesinos andaluces, lo que, a su vez, genera desconfianza, al pensar que estas medidas van a carecer de continui- dad en el tiempo.
. Además, la conciencia de los gestores públicos de